10...qué número más bonito, no?

Pues sí, chicos y chicas.... 10 kilillos he perdido ya! Y por ahora no ha sido tan difícil. Hombre, no os voy a negar que de vez en cuando mi voluntad anda un poco distraída y de pronto me veo mirando como una boba a alguien comiéndose un gofre...pero entonces pienso ¡¡quita, quita, ¿500 calorías de una sentada? ni loca!!! Y vuelvo a mirarme los pantalones hasta ahora morcilleros, que ya empiezan a hacer bolsas por aquí y por allá... y me animo yo sola... Porque yo también lo valgo, o no?!

Ahora la operación post-Navidad. O sea, hacer desaparecer de casa los pocos dulces navideños que tenía para recibir a las visitas. Así que a la basura con los restos de turrón. Los bombones se los voy dando a mi novio para que se los vaya terminando. Si, si, los bombomes, esos cabroncetes que duran un segundo en la boca y toda la vida en las caderas.

Pues nada, hoy para celebrarlo me he ido de rebajas y me he comprado 3 cosillas. Pá la nena. Ole.

Sed buenos, que luego todo se sabeeeee!